La ilusión y las ganas por disfrutar de nuestro Carnaval es algo muy grande que entre toda la sociedad villarrobledense consigue. Por supuesto esta comparsa, creada sólo hace tres años, es un buen ejemplo de ello. Por casualidad, y gracias a una curiosa anécdota que nos cuentan más adelante, la Comparsa Cencibel participa en nuestros carnavales, y afortunadamente lo hacen con toda la ilusión del mundo y con unas ideas extraordinarias que engrandecen, más si cabe, nuestra fiesta grande.

Hemos charlado con sus miembros y todo esto es lo que nos han contado:

¿Cuándo comenzó a participar esta comparsa?
La comparsa Cencibel nació tres años atrás, por lo trato éste sería su tercer año, coincidiendo con el vigésimo cumpleaños del  IES Cenciberl, que abrió sus puertas en el curso 2001-02.
La comparsa tiene el mismo nombre que el Instituto porque surgió por iniciativa de un grupo de alumnas de 1º ESO. En Villarrobledo, la mayoría de alumnos, empiezan participado en el Carnaval Infantil desde el Cai y continúan en sus respectivos colegios, por lo que es normal que al llegar al Instituto echen de menos continuar desfilando y así lo solicitaron en casa y en el Centro.

¿Qué os motivó para empezar a participar en esta fiesta?
El entusiasmo de ese grupo de  niñas de 1º de ESO, a las que después se sumaron varios niños, así como un grupo de alumnas de la modalidad de arte de bachillerato y otro de alumnos del Ciclo superior de electricidad, con el apoyo de sus madres (que crearon un equipo de trabajo digno de mención por su disponibilidad y compañerismo); hizo muy fácil la coordinación, por parte de los docentes que abrieron el Centro y participaron, arropando la iniciativa, para que el proyecto se hiciese realidad.
La motivación surge de la ilusión y entusiasmo del alumnado y sus familias, que desde el primer momento, contaron con el apoyo del Equipo Directivo del Centro, así como del AMPA. Así fue como, por primera vez, un Centro educativo de Enseñanza Secundaria de Villarrobledo, solicitaba participar en el desfile de adultos de Carnaval.

¿Cuántas personas conforman la comparsa?
El primer año, la comparsa la conformaron alrededor de treinta participantes entre alumnos y familiares: unos desfilando, otros conduciendo los dos coches que abrían y cerraban el desfile, otros llevando la estructura movible -que sin considerarse carroza, por sus dimensiones, abría el desfile- que llamó la atención por su originalidad y plasticidad (diseñada, creada y elaborada por el alumnado de Bachillerato y Ciclo de Electricidad con la colaboración de un grupo de madres y padres).
Todo comenzó con una anécdota digna de ser contada: un día de Navidad, en el cine de la Casa de la Cultura, viendo  la película de “Cascanueces”, una alumna de 1º ESO, Teresa Santos, con voz bajita le decía a su madre “Qué pena mamá que no haya comparsa de Carnaval en el Instituto, el traje de la protagonista sería un disfraz precioso”.  Al regresar al Centro, después de vacaciones, preguntamos a Ana Simón si quedaba tiempo para organizar una pequeña comparsa e intentar participar. Su respuesta fue: “Si queréis salir y lo organizáis rápido, os esperamos”. Así fue como, a ritmo vertiginoso, se corrió la voz entre alumnado y familias y se convocó la primera reunión una fría tarde a mediados de enero, en el Instituto.
De ahí surgió  el primer grupo de madres que confeccionaron un equipo de trabajo que, recogiendo la propuesta de Cascanueces, se lanzaron a  diseñar y confeccionar el modelo, que en una semana se mostraba con patrones incluidos.
En menos de un mes, el primer año, La Comparsa Cencibel desfilaba, milagrosamente, gracias al entusiasmo y trabajo a contrarreloj de las familias involucradas. El aplauso de la ciudadanía durante el desfile , ante tal iniciativa,  contagiados por el entusiasmo de un grupo de adolescentes que  a pesar de ser los más jóvenes de todos los participantes demostraron estar a la altura, sobradamente;  fue el mejor premio que se pudo recibir para querer continuar al año siguiente.
El segundo año, la comparsa creció hasta acercarnos a los cuarenta participantes.  El año pasado, (2020)  todo se hizo con más antelación. En el primer trimestre de curso se iniciaron los preparativos. La idea surgió pensando en los participantes: adolescentes muchas de las cuales muchas iban a academias de baile, a música…. Así surgió la idea de  “La feria de Abril”.
Un grupo de madres diseñaron un traje de chica y otro de chico adecuados para bailar, muy aplaudidos por su originalidad, trabajo artesanal y sobre todo plasticidad (la enagua imitaba un clavel).

¿Cómo hacéis para poneros de acuerdo para el desarrollo del traje?
Desde el primer trimestre se organizó un taller de baile en horario extraescolar en el Instituto. En horario de tarde acudieron los participantes, alumnado y varias madres, para aprender varias coreografías diseñadas para la ocasión por Ana, monitora de zumba y madre de una alumna de primero. Paralelamente, este segundo año, organizábamos también en horario extraescolar un taller en el que participaron un grupo de alumnas de 1º de bachillerato de la modalidad de arte que diseñó y elaboró la puerta de la Feria de Abril que abriría la comparsa y que iluminaría un grupo de alumnos del Ciclo de Electricidad y electrotecnia.
Aun sin perder la esperanza, pero a sabiendas de que era casi imposible conseguir algún premio, la Comparsa Cencibel con la “Feria de Abril, obtenía un 4º premio después del caluroso aplauso por parte de la ciudadanía de Villarrobledo que brindaron a las jóvenes durante los dos días en el desfile mientras se bailaba a ritmo de flamenquito desde Rosalía hasta Rosario Flores, contagiando de su juventud y alegría.

¿Qué premios habéis ganado y de cuales tenéis grabados en la memoria?
Efectivamente, aunque era difícil, no era imposible; como nos advirtieron miembros de otras comparsas que nos felicitaron previamente por haber conseguido la proeza, por segundo año consecutivo, de formar parte y  enriquecer, con nuestra pequeña aportación, el desfile de adultos.
Queda grabado cómo se recibió la noticia, no sólo por parte de los participantes que subieron al escenario con enorme júbilo, sino también,  por quienes llenaban la Plaza Vieja,  la noche de la entrega de premios, y aplaudían al grito de:  ¡Os lo merecéis!.
Indudablemente, además del reconocimiento, la alegría también se debía a la cuantía económica que permitirá que el próximo año  los padres, el Centro y el AMPA no tengan que correr con el total de los gastos.  Por todo ello, este disfraz fue, es y será recordado con un cariño especial.

¿Con qué os quedáis de nuestro Carnaval?
El desfile es lo más emocionante porque el aplauso y reconocimiento del público es el mejor agradecimiento al trabajo, esfuerzo y gasto que supone la participación.

Para finalizar, el equipo directivo del Ies Cencibel quiere agradecer públicamente, la participación y entusiasmo a nuestro alumnado, a sus familias y al AMPA; así como a todos los profesores que han creído en este proyecto desde el principio. Por supuesto, al Ayuntamiento y a la Casa de la Cultura; y por último, nuestro más sincero agradecimiento, a todas y cada una de las comparsas participantes en el desfile de adultos, por su acogimiento, ánimo, compañerismo, felicitación… porque desde el principio nos hicieron creer que había espacio para un Instituto de Secundaria, el Ies Cencibel, que pasará a la historia del Carnaval de Villarrobledo, como el primero que ha participado y conseguido su primer premio el segundo año que ha desfilado.
Estos jóvenes son el futuro de nuestro Carnaval, por lo que nos sentimos muy orgullosos de nuestra aportación a la mayor y mejor actividad socio-cultural de Villarrobledo, así reconocida, local, provincial, regional, nacional e internacionalmente.

¡Larga vida al Carnaval de Villarrobledo!