Quienes de todos aquellos villarrobledenses que disfrutan de nuestro Carnaval no conoce al Hombre de Plata. Es uno de los clásicos en los desfiles, pero no sólo en ellos, puesto que intenta participar en la mayoría de las actividades que se desarrollan en nuestra fiesta grande. Y es que, como el mismo dice, el Carnaval no sólo es desfilar, y el mismo no sólo lo hacen las personas que desfilan sino todas aquellas personas que, por ejemplo, como  espectadores, también acompañan en todos los actos.
En la entrevista que reproducimos a continuación, nos  cuenta que en su segundo año de participación oficial en el Carnaval de adultos es cuando decidió  “coser” con cinta adhesiva su propio traje utilizando plástico de burbuja plateado. De ahí el nombre de “El Hombre de Plata”.
En el año 2013 llegó el reconocimiento que más le ha llenado de orgullo como carnavalero, que es haber sido galardonado con la Máscara de Oro. Sin duda, de este galardón tiene muy buenos recuerdos y le impulsan a seguir luchando y trabajando por esta fiesta que, como bien indica, es un orgullo de generaciones de villarrobledenses.
Aquí os dejamos esta entrevista con el Hombre de Plata, un clásico de las máscaras individuales.

¿Hace cuántos años comenzaste con esta aventura del Carnaval? 
Como todos los villarrobledenses llevo participando en esta fiesta toda la vida. Carnaval no es solamente desfilar. Creo que “hacen” tanto Carnaval las personas que salen a la calle a desfilar luciendo sus trajes y contagiando su alegría, como aquellas que acompañan como espectadores dando palmas desde las aceras o los balcones; las que salen una noche a la carpa con sus amigos o las que cosen los disfraces pero luego prefieren seguirlo desde casa. Hasta el vecino que se pone un gorro o unas gafas graciosas para ir a la compra “hace” Carnaval. Personalmente, yo he tenido la suerte de poder tocar la mayoría de los palos. Ya de crío mi madre me cosía disfraces para estrenar después de la Ceniza. Casi no recuerdo ese primer disfraz, era muy pequeño. Con la adolescencia vinieron las ganas del “asalto a la calle” y el “¿a que no me conoces?”. Más adelante, con amigos participé en los bailes del Círculo Mercantil y en el Cine Navarro. En los años ‘80 tuve la oportunidad de salir en comparsa con unos amigos y así conocí a mi mujer. Años después participé en los Desfiles Infantiles junto a mis hijas, salí durante varios años de espontáneo en la Noche de Bodas con mi amigo Jose e incluso participé en una chirigota. Estos últimos años he salido en el Desfile de Adultos con el nombre “El Hombre de Plata” e intento participar de todas las actividades a mi alcance.

¿Cómo se te ocurrió el nombre? 
Muy a mi pesar, mi pasión por el carnaval no me ha ayudado a desarrollar la habilidad de la costura, y son mi amiga Amalia y mi mujer, Gloria, a las que les doy las gracias, las que se encargan de plasmar en tela la idea que haya tenido ese año. Fue en mi segundo año de participación oficial en el Carnaval de adultos cuando decidí “coser” con cinta adhesiva mi propio traje utilizando plástico de burbuja plateado, de ahí el nombre de “El Hombre de Plata”.

¿Qué te  motivó para empezar a participar en esta fiesta? 
Supongo que habiendo nacido en Villarrobledo, el principal motivo que me impulsa a participar en el Carnaval es la propia inercia de generaciones y generaciones de carnavaleros, aunque, sin duda, lo que me ha hecho seguir participando es el ambiente festivo que se respira en todo el pueblo durante 24 horas al día.
Yo soy el único que desfila pero, como he dicho antes, una amiga y mi mujer me ayudan a hacer el disfraz y mi hija pequeña me suele maquillar.

¿Cómo decides el disfraz y la actuación a realizar cada año?
Durante todo el año van surgiendo ideas a las que, llegada la época de Navidad, se les empieza a dar forma y una vez pasada la festividad de Reyes Magos se empieza con los primeros bocetos. Las ideas que se descartan un año son reestudiadas al año siguiente.

¿De qué disfraz tienes un recuerdo especial? 
Cuando era joven y salía en la comparsa “Las Lavativas Presumidas”, salimos disfrazados de “Fantasía de Colores”. Aunque el nombre no diga mucho, en esa época no había muchos materiales entre los que elegir. El principal recurso era la imaginación y, para dar el efecto de color a nuestro atuendo, utilizamos trozos de espejo que encargamos cortar al cristalero. Los espejos reflejaban las luces de la calle y quedó muy vistoso. Hoy en día hay alternativas más seguras y económicas, pero lo que más disfrutábamos era reunirnos y ver de qué forma se podía conseguir el efecto deseado. En los últimos años el traje que ha causado más sensación ha sido el de “Bailarina Lady Gaga” en el que ninguna pieza pasó por la máquina de coser.

-¿Qué y cuantos premios has ganado?
2008, “Cartero Racional”, 1er Premio.
2010, “Bailarina Lady Gaga”,1er Premio Máscara.
2011, “Soldado Hevzone”. Guarda Griego de la Plaza Sintagma.1er Premio  
2011, “El Max Empollón”, 2º Premio Desfile de Bodas con “Los Max”.
2014, “Gheisa”, 1er Premio.
2016, “Oktober-fest”, 1er Premio.
2018, “Carrusel de Primavera”, 1er Premio.
2018, “Compradora compulsiva”, Premio “Tacón Lejano” (último en llegar), en la 1ª Carrera de Drag Queens.
2019, “Fantasía en rojo, blanco y negro”,1er Premio.

En el año 2013 llegó el reconocimiento que más me ha llenado de orgullo como carnavalero, que es haber sido galardonado con la Máscara de Oro.

En el carnaval de Villarrobledo  participan varias comparsas distintas, ¿cómo es la relación entre vosotros? 
La fiesta del Carnaval está integrada completamente en el calendario cultural de Villarrobledo y, como tal, se manifiesta por todos los vecinos del pueblo, cada cual a su manera. Los desfiles son principalmente de grupos y comparsas, y atraer la atención de los espectadores cuando se desfila de manera individual es complicado. Más sencillo es si uno se mezcla con las comparsas para disfrutar de la música de las charangas, aunque eso no es siempre fácil de conseguir. Existe una complicidad especial entre todos los carnavaleros que participamos activamente en esta fiesta que no solo se manifiesta en las fechas de la misma, sino que se refleja todo el año en la manera de vivir.

¿Cuál es tu parte favorita del carnaval? 
Del Carnaval de Villarrobledo me gusta todo, desde el Jueves Lardero hasta el Domingo de Gachas. Estos últimos años he cambiado mis preferencias. Antes disfrutaba más durante los bailes nocturnos y ahora mi parte favorita probablemente sea el Carnaval de día, pero disfruto de todo. Me gustan las charangas que se arrancan a tocar al final de la noche. Me gusta la canción con la que nos lleva sorprendiendo varios años Jose Caja. Me gusta ver contentos a los amigos de Asprona en el desfile infantil, junto a los que he participado alguna vez. Me gusta la comida benéfica de la Asociación del Alzheimer de los martes, que se extiende durante toda la tarde. Y echo de menos la Verbena que organizaba Anthrax.
Me gusta que se trate de innovar proponiendo nuevas actividades como la Carrera de Tacones, el Carnaval Animal… Me gusta la gente que se mete en el personaje que representa provocando risas. Me gusta la espontaneidad de la gente que no se ajusta a normas sin faltar al respeto de sus vecinos. Me gusta el recuerdo que tengo de mis noches de Carnaval y, sobre todo, mes gusta saber que, conforme pasen los años, tendré nuevos recuerdos del Carnaval de mi pueblo.
Pero, sin ninguna duda, lo que hace único al Carnaval de mi pueblo es su duración, diez días, once noches, y los desfiles infantiles, por los que realmente el Carnaval de  Villarrobledo merece su distinción como Fiesta de Interés Turístico Nacional.